Enfermarse durante un viaje

Entre las personas que viajan, hay una serie de enfermedades que son habituales pero que pueden ser prevenidas o disminuidas. Estas dolencias ocurren tanto en grandes como en pequeños, por lo que las siguientes recomendaciones son válidas para todos.


I) PROBLEMAS GASTROINTESTINALES

La diarrea es la enfermedad más común entre todas las personas que viajan y acostumbra aparecer ya en los primeros días del viaje. Esto ocurre más frecuentemente en regiones que tienen un nivel sanitario bajo: el turista prueba comidas regionales que no están elaboradas con la higiene y seguridad necesarias.

Las formas de prevenir las dolencias gastrointestinales:

- Lávese las manos siempre antes de ingerir alimentos, después de higienizar al bebé en su cambio de pañales, luego de ir al baño y luego de haber tocado algún animal. Recuerde. El alcohol en gel puede reemplazar al agua y jabón.

- Consuma alimentos que sean frescos y que estén cocidos al momento; no consuma si se han mantenido a temperatura ambiente con anterioridad.

- Evite consumir alientos crudos y ensaladas de cualquier tipo. En cuanto a las frutas, elija aquellas que tienen cáscara gruesa, lavándolas primero y quitándoles la cáscara después.

- Tome agua mineral con gas, pues es más difícil que sea adulterada, y tome té o café sólo preparados con agua hervida.

- Evite los lácteos como leche, yogurt y quesos no pasteurizados.

- No compre alimentos a puestos en la calle y tampoco beba líquidos con hielo, pues desconoce qué tipo de agua han usado para hacer hielo.

II) ENFERMEDAD DE ALTITUD

Conocida como ‘mal de montaña’, esta enfermedad surge en viajeros de cualquier edad que se dirigen a grandes alturas en relación al nivel del mar. No se preocupe, hay formas de prevención:

- Subir con lentitud para permitir que el cuerpo se vaya aclimatando.

- Beber líquido constantemente para estar hidratado.

- No realizar actividad física agitada a grandes alturas, esperar que el cuerpo se adapte.

- Elegir dormir, en la medida de lo posible, en un hotel o casa que esté más cerca del nivel del mar.

- Informe a su médico sobre su viaje hacia grandes alturas; tal vez él pueda recetarle algún medicamento para que prevenga los síntomas del apunamiento.

III) FIEBRE AMARILLA

Es el mosquito “Aedesy Haemagogus” quien, a través de su picadura, transmite esta enfermedad viral. Esta enfermedad se presenta más frecuentemente en países africanos al sur del desierto de Sahara y en países tropicales en América del Sur. Esta enfermedad, en turistas extranjeros, puede ser muy seria, llegando a la mortalidad.

Existe una forma de prevenirla:

- la vacuna contra la fiebre amarilla es 95% efectiva. Luego de 10 días de aplicada, empieza a dar protección que se extiende por 10 años. Tiene algunas contraindicaciones, por ese motivo, consulte antes a su médico.

- muchos países tienen como requisito obligatorio a los turistas que llegan, hacerlo con el certificado de vacunación.

ATENCION: no viaje sin un seguro médico internacional. Siendo –o no- exigido como obligatoriedad en el país de su destino, viajar con seguro será siempre la clave para proteger su salud.

Cotice en VITA ASSISTANCE y adquiera su seguro médico internacional en pocos pasos y online. Será la mejor forma de prevenir cualquier situación estresante con su salud.